Un incendio en un edificio podría significar la devastación total de una propiedad inmueble y de todos los artículos de valor dentro de ella, así como también lo más importante, la posible pérdida de vidas humanas.
Para prevenir esto es necesario conocer todo en materia de protección contra incendios, así se puede reducir al mínimo la propagación del fuego en determinadas instalaciones, sin importar si son comerciales o residenciales.
La mayoría de las personas están familiarizadas con los conceptos básicos sobre extinción de incendios, como el uso de rociadores, extintores, etc; pero la protección contra incendios va mucho más allá de eso. Desde el momento de la construcción de la edificación hasta un mantenimiento regular preventivo, la protección contra el fuego debe ser una base fundamental de la conservación de la estructura física, de otra manera, puede aparecer un incendio en cualquier punto de origen y ser invisible, pasar desapercibido por un tiempo, hasta que ya es tarde para darle una rápida solución.
Para muchas personas, el término “prevención de incendios” despierta imágenes de fumadores distraídos, el uso de un extintor de incendios y planes de emergencia para la evacuación de una edificación. Para las personas experimentadas que participan en el proceso de construcción o conservación de una propiedad, el término “prevención de incendios” puede traer pensamientos sobre controles generales de fuentes de ignición, el manejo seguro de líquidos inflamables y el mantenimiento óptimo y bien delimitado de las salidas de emergencia.
Entonces, la prevención y protección contra incendios es un trabajo que se debe realizar con frecuencia en una edificación. Si ya hay protección en un edificio determinado y se tiene la adecuada licencia de actividad, siempre es indicado realizar trabajos de adecuación y reforzar la protección.
Al realizar esto se puede prevenir el colapso de la estructura a través de una resistencia vulnerada por el fuego, por eso, cuando se esté construyendo un edificio o haciéndole el mantenimiento respectivo la protección contra el fuego debe ser una prioridad, destinada a salvar vidas y bienes, así como rescatar de al propio edificio de la devastación total.
La prevención de incendios realmente eficaz tiene cuenta diferentes factores que empiezan por la selección del sitio, construcción, diseño, lugares de almacenamiento y, lo más importante, los factores humanos. Estos factores son básicamente los bomberos y las personas que se encargan de establecer los códigos de construcción, pero esos códigos por lo general son mínimos.
Es importante que los propietarios de edificaciones u instalaciones sepan entender muy bien los riesgos únicos y propios que presenta cada propiedad, por lo tanto, para tener en sus manos la Licencia de Actividad, deben cumplir con ciertas características adicionales de seguridad y llevar a cabos los procedimientos y adecuaciones que sean necesarias para garantizar la seguridad.